Bordón-La Balma

Esta caminata recorre 20km de sendas y pistas para llevarnos hasta la Balma sin tocar prácticamente la carretera. Gran parte del recorrido discurre por frondosos bosques que nos harán mucho más cómodo el camino en días soleados.
Salimos de Bordón dirección hacia la senda de las Chorritas, donde tenemos una preciosa subida por pinares. Tras un tramo de pista, llegamos a otra senda, dirección hacia Luco, esta vez llena de empedrados muy bien conservados.
En Luco podemos entrar al pueblo para coger agua en la fuente. Nosotros seguimos por senda bajando primero y luego en subida. Tras esta tercera senda tendremos muchos tramos de pista dirección a Torremocha. Se trata de una zona que se está recuperando del incendio de 1994, pero ya está con los pinos y carrascas muy crecidos. Eso sí es una pista con subidas y bajadas constantes, un auténtico rompepiernas.
De nuevo abandonamos la pista para seguir por la senda pr que nos llevará a Torremocha. Empezaremos bajando hasta un precioso barranquito con un puente de madera. Después subiremos por senda empedrada hasta el pueblo abandonado desde los años 60. Un lugar muy interesante y sobrecogedor.
Tras visitar el pueblo, seguimos por pistas. Tras atajar por lo que fue una antigua pista pronto entraremos en frondosos bosques que no abandonaremos hasta el final de la ruta. Tenemos que subir hasta el cabezo Millán, el punto más elevado de la ruta.
Después del esfuerzo aprovechamos para reponer fuerzas y contemplar las espléndidas vistas. Después del almuerzo, sólo nos queda bajar, primero por una pista abandonada y luego por pistas en muy buen estado hasta nuestro destino final.
Aquí terminaremos la caminata con una visita al santuario y una comida con buenas vistas.